Luis Gomero, agroecólogo peruano, nos comenta un grave problema que identificó en la localidad de Guarabi, localizado en el valle del Chillón (Lima, Perú), durante una visita de trabajo con sus alumnos.
En mis muchos años de recorrido por el campo en el país, no había encontrado esta escena de manipulación de uno de los herbicidas más tóxicos del mundo, conocido como paraquat. Sentí una sensación de temor e indignación al ver al agricultor en esa situación, me acerqué y el accedió a mi persona y a mis alumnos a un diálogo sobre su trabajo, a una sola voz preguntamos ¿Qué está aplicando?, ¿porque no se pone guantes para proteger sus manos? ¿no tiene usted miedo de intoxicarse? y muchas otras preguntas más, que él respondió solo con una frase: "si no uso este herbicida la mala hierba me gana".... su respuesta fue clara y concreta como indicando que no hay otra opción, cuando en realidad hay muchas alternativas para el manejo integral de las malezas, que lamentablemente no se conoce por falta de asistencia técnica.
Queríamos seguir dialogando, ante su apertura le pedí que me mostrara sus manos para ver sus uñas, de esta manera evidenciar si ya tenía los efectos crónicos que genera este herbicida en la deformación del crecimiento de las uñas y laceraciones en la piel, pude observar que ya tenía daños iniciales y él mismo confirmó que siempre hace uso de dicho herbicida.
Después de este breve diálogo él continuó con su tarea de mezclar el veneno, llenar en su mochila fumigadora, ponerse a la espalda y aplicar a sus plántulas de fresa que estaban cubiertos con un vaso de plástico para que el herbicida no los queme y solo mueran las malas hierbas. Lo que más me sorprendió fue observar que después de la fumigación, una mujer con su hija recogían los vasos para colocarlos a otras plantas, no me resistí y le invoqué que la niña no debe hacer esta labor, pero ella inmediatamente me respondió: "en el campo así trabajamos somos fuertes, no somos como los de la ciudad" y cerró el diálogo, tampoco insistí.
Entendí que el tema central de todo este problema en la vida rural es la educación y el nivel de autoestima que debemos tener..... Esta escena me sirvió para mostrar a mis alumnos lo complicado que es garantizar el "uso seguro de los plaguicidas".
Para información, este herbicida ya está retirado del mercado en muchos países, hasta ahora no entiendo porque SENASA sigue postergando esta decisión, el producto se mantiene en el mercado solo para satisfacer a los importadores de agroquímicos....después de esta escena creo que todos debemos exigir al Ministro de Agricultura la reestructuración del SENASA, porque no está sirviendo para nada a los pequeños y medianos productores.....