Una iniciativa que comenzó en Santiago del Estero para producir semillas orgánicas, un insumo clave, y abastecer a los productores familiares, apunta a expandirse a todos los cultivos hortícolas y a otras provincias del NOA y de Cuyo.
Con más de 3 millones de hectáreas certificadas, la Argentina ocupa el segundo puesto en el ranking mundial de producción orgánica. El sector mantiene un volumen firme de exportaciones y una demanda en crecimiento. Además, está apostando a ganar terreno en el mercado local y fortalecer el desarrollo de las empresas familiares con la generación en el país de semillas de calidad certificada... Lea la nota completa aquí.