En la provincia Heilongjiang en China, el año nuevo lunar del gallo, ha traído un importante regalo que ha puesto a temblar al mundo transnacional: se han prohibido los cultivos transgénicos.
El Reglamento prohíbe el cultivo de maíz, arroz y soja GM en la provincia Heilongjiang, principal productor de granos de China, y prohíbe la producción y venta de los cultivos transgénicos y el suministro de sus semillas. Esta regulación entrará en vigor el 1 de mayo de 2017.
Esta legislación estratégica, hasta ahora provincial, se suma a otra realizada hace seis meses en Rusia, y juntas podrían tener un amplio efecto político en el mercado mundial y apoyar aún más la crisis en que se encuentra la estrategia transnacional de los transgénicos. En ese contexto ubicamos la batalla en China y en Rusia. Dos espacios que son actores políticos decisivos para el cambio hacia un mundo sin transgénicos y verdaderamente multipolar. El artículo completo aquí.