Los detalles del asalto brutal de Monsanto a la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC)
La semana pasada hubo en el Parlamento Europeo un importante debate sobre los riesgos para la salud del glifosato. Uno de los desencadenantes de este debate y de las investigaciones parlamentarias posteriores que pueden seguir a este debate, fueron las revelaciones sobre la “guerra contra la Ciencia” emprendida por Monsanto, que han sido publicadas por el diario francés Le Monde.
En una investigación publicada en dos partes por Le Monde, los periodistas Stéphane Foucart y Stéphane Horel detallaron los ataques que la Empresa Monsanto está llevando a cabo contra la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC), de la Organización Mundial de la Salud, y que fue el organismo que metió al gato entre las palomas cuando concluyó que el glifosato era posiblemente carcinógeno para lo seres humanos.
La dureza y duración de estos ataques no tiene precedentes, según el director de la IARC. Y no hay muestras de que vayan a disminuir. De hecho, tan pronto como los miembros del Parlamento Europeo mostraron su descontento con el proceso de aprobación del glifosato, la agencia de noticias Reuters publicó un artículo que contenía acusaciones contra la persona que presidió la revisión del glifosato por parte de la IARC.
Y rápidamente, la reportera de Reuters Kate Kelland recibió un material seleccionado por parte de Monsanto y publicó un artículo que daba lugar a falsas interpretaciones. Y también resultó que un “científico no dependiente de Monsanto”, en el que Kelland se había basado para redactar el artículo, era en realidad un consultor pagado por Monsanto.
En una crítica devastadora al artículo de Kelland realizado por la ex periodista de Reuters Carey Gillam, se señalaba que estos ataques debían ser vistos como “parte del esfuerzo continuo y cuidadosamente orquestado por Monsanto y la Industria de los plaguicidas para desacreditar el trabajo de la IARC”.
Y lo que la investigación de Le Monde deja claro es que estos ataques mediáticos son simplemente un asalto brutal y multifacético que está librando Monsanto... Lea la nota completa aquí.